8 de marzo de 2010

Mi piel echa en falta otra piel


Era algún tipo de subespecie, o eso creía ella. Necesitaba el calor humano, como todas esas chicas de manos heladas. Ya se había cansado de buscar a alguien que las calentase  y se conformaba solo con encontrar a quien no saliese corriendo al contacto con su piel.

2 comentarios:

  1. No creo que ella fuese una subespecie, si sin embargo quienes salian corriendo al contacto con su piel quizá demasiado suave para las rugosas manos de seres tan asustadizos.

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